Si estás leyendo esto, probablemente te sientes atrapado en una rutina que ya no te llena. Tal vez llevas tiempo con esa sensación de estar bloqueado, como si algo te impidiera avanzar. Quizás el estrés y la ansiedad no te dejan disfrutar del presente, y el miedo al futuro te frena.
¿Te resulta familiar?
Sé lo que es sentir que, por más que lo intentas, parece que no avanzas. Te frustras, sientes que no das tu máximo, que podrías hacer más, pero algo te detiene. Y ese “algo” puede ser el miedo al fracaso, la inseguridad de no estar a la altura o simplemente no saber por dónde empezar.